Quincemíl hojas de papel muy fino sobrevuelan la ciudad,
entres muchas cosas animadas y desanimadas
que rondan el jardín en la ocasión.
Es asi como se ve todo.
Es asi que el silencio deja llevar a las cosas
y las luces ven a la habitación,
la hacen cambiar.
Al pasar veo una mujer tendida por la ventana
y me mira con cariño
y ahora sé que el silencio es sólo él,
quien deja llevar las cosas.
Las cosas deformes y conformes.
A su vez todo es azul y todo parece una lágrima
una habitación, un florero y sangre, sangre por todas partes.
Como si hubiese explotado alguién, como si hubiese llorado alguién eternos instantes.
El té era de color rojo esta mañana pero ya nada puede extrañarme, sí es que siempre todo me parece igual. Ya nada me motiva el despertar.
Son las paredes que me miran y sus cosas que me exigen más, y de más.
¿Es posible que yo pueda? ¿Es posible que yo entienda?
No pretendo nada. No busco nada.
Yo soy asi y ella me hace sentir asi.
Su aliento por todas partes y el latir de un corazón que no sé donde sale.
Falsas miradas al paso que habrán sido alguna vez pero que ahora no lo son.
Es todo una búsqueda que se asimila a algo pero no sé a qué.
No pretendo entender.
No pretendo vivir.
Gotas caén desde el sol.
Ya no me interesa mirar el cielo mientras él este.
Esta todo más que podrido y será tan posible dejarme llevar.
Es tu impulso, tu presión.
Pero por algún camino llegaré,
no me interesa si es que lo tengo que buscar o él tendrá que buscarme.
Estoy dispuesto a esperar.
Experimentaremos armarios y haremos buenos amigos.
Querida melodía.
Nadie podra llevarme por ella.
Es solo su desición,
no quiero más tarea
yo quiero descubrir una mezcla,
frecuencias intensas.
No me digas curioso, no me digas nada.
Sé sencillamente.
Sé como quieras ser.
Una fábrica, una virgen
nada tiene destino.
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