Últimamente puedo ver pantallas en todos lados. Ella se ríe, se ríe desesperadamente.
Una aguja sin corte filoso cae en este segundo. Ella se ríe y yo ya no puedo verla.
Últimamente siento más miedo, últimamente veo menos que siempre.
Ahora sé que todo esto nunca fue real y me produce cierto asco. Ya no me siento capaz capaz de creer. Mientras siga viendo de esta manera creer o entender es algo que no existe, que rodea una superficie que yo no poseo y no me causa gracia, sin embargo a ella sí.
Yo sé que ella se ríe, sé ríe porque no sabe que hacer, se ríe porque sabe que tengo miedo y en este momento he decidido olvidarme de todo lo que sé de mecánica y ponerme a pensar desde un punto de vista un poco más general.
El piso de azulejos blancos se ve intervenido por un color azulnegro que puedo ver que viene desde allá lejos. Esto no tiene química. Esto no tiene una clara explicación.
Por más que me esfuerzo, todo vuelve a mi mente en una forma inevitable.
Ella se desnuda y se conecta con el ambiente que la rodea y se ríe y yo aún no comprendo si es todo esto tan real como lo parece.
Mi suspiro se hace cada vez más y más grande, es que el aire es tan pesado por aquí.
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